sábado, 14 de marzo de 2015

Los versos que nos parten

2014 11 22

Los versos que nos parten
están ahí para volar,
acercarse a ellos con lluvia,
con sol o con sal…
Levitar entre sus puntos suspensivos,
mientras el mundo no para de girar…
Anclar el freno
a su rima libre y alborotada
y no sucumbir a la verdad…

Versos que algún cantante gritó,
algún poeta hizo de ellos su opiáceo,
un adolescente regaló en una botella
                 o los que se perdieron…
Versos que sin su escucha,
su tormenta o su sexo,
no cambiaron el girar
apocalíptico del mundo
pero en su día
mi alma partieron…
Me hicieron volver a mi planeta

subir al escenario principal

No sé si sabré describir

2014 11 23

No sé si sabré describir
lo de hoy, algún día…

No sé si quiero saber…

Cruzo los dedos y respiro hondo,
sin humo; para  que todo
fluya como un vendaval
o el tiempo cierre los ojos
y viaje conmigo hasta el infinito…

… y más allá…

La frase hecha y la rima fácil,
alcanzan pero no llegan…
ya ralentizaré y podré hablar…
o mudaré de planeta…
o gritaré en mi rincón favorito…
o silenciaré, modo off, for ever…


…qué se yo!!

Sobrevivir no es de valientes…

2014 19 11

Sobrevivir no es de valientes…
Es de cobardes que se abandonan
en laberintos grises y oscuros
esperando que un día, por casualidad…

Sonríe, salta, despéinate
tú, que estás calvo desde el 2004;
abandona ese laberinto
o sáltatelo, rompe paredes,
desentona, brilla, deslumbra…

Dientes, dientes… que les jode!!

Condenarse a la claustrofobia,
delata una mente inerte y vana…
no incurrir en la locura transparente
no induce a nada bueno…

Gracias por considerar mi vida
una sonrisa perenne en la tuya,
hace que la cuesta de enero de cada mes
sea un verdadero paraíso.


Nueve del cuatro

2014 11 18

Nueve del cuatro
del cuatro mil nueve.
Descansando apacible
entre el populacho
que hacen mover sus piernas
entre calles que antes
ni siquiera percibían sus sentidos…
me llega un aroma especial,
un movimiento singular…
Eso que se llama intuición
me regala una vuelta de tuerca
                y encontrarte…

Cuatro pasos detrás de ti…
y desaceleré de repente.

El gentío seguía veleta
y yo hipnotizado
comencé a acompasar
mis pasos, luego mis latidos
y así desde el kilómetro 4,
sin pestañear, mi sonrisa
se cruzó con la tuya…

Mi sensibilidad atrofiada
despertó entre el ensordecedor
aplauso de familias anónimas
que repartían palmadas
como pingüinos en época de celo…

Y en el kilómetro 9…
ya eras de mi familia;
era mi meta alcanzada
después de tantos maratones,
tantas Behobias… tantas croses
embarradas y sin aliento.

Que decir, que los otros 33 kilómetros
se me pasaron volando…
No había razón para olvidarlos
ni tampoco para recordarlos…

Pasaron, como pasa el campeón
por la meta… alguien tiene
que ganar la puta carrera,
llevarse las medallas
y sonreír para la foto…

No me digas el cómo y
el porqué de mi pérdida
de peso repentino… mi ligereza,
mi suavidad y sosiego
para levitar por las nubes,
difuminar las calles grises
en ríos de luz navegables,
donde un eterno labrador
se hizo navegante, cogió su velero
y se echó a-l-amar
                y brilló…

No me digas cómo,
pero alcancé mi meta
aquel 9 del 4 del 4009
en el kilómetro cuatro…
colgué las botas
   y no corrí

                ni un kilómetro más…

Todo eran matemáticas

2014 11 15

Todo eran matemáticas.
Uno más dos, multiplicado por once
más siete, menos cuatro
dividido entre nueve
y elevado al cuadrado…

El número mágico surgía…
Era como una mentira perdida
entre algoritmos neperianos.
La mayoría de la gente
se perdía mirando la pizarra…

Ella y yo, boca a boca;
con el pijama puesto
en la sala de juntas,
sabíamos la respuesta…

Pura matemática. Exacta,
compleja; tan lógica
como esta relación
entre entidades abstractas
que escapan de la ciencia,
del puro entendimiento…

Surgida de la nada…